A partir del programa propuesto, nuestro edificio se genera con las premisas de la forma cuadrilátera del solar y la creación de un patio-plaza que servirá de organizador de la propuesta. La distribución de las piezas favorece la apertura visual hacia el exterior (paisaje) y al interior (plaza-patio). Se busca una racionalidad constructiva como forma de componer que elimine costes futuros y que no deteriore la riqueza espacial.
Al proponer todo el programa en una sola planta, se busca una arquitectura sin barreras y una sostenibilidad económica eliminando comunicaciones verticales. También se pretende una sostenibilidad climática a través de protecciones solares en huecos, patios reguladores de humedad, ventilaciones cruzadas, … y sobre todo con la creación de estos patios ,una sostenibilidad psicológica para el pasajero.
La identidad de nuestro solar, caracterizado por una llanura que se pierde en el horizonte, generado a partir de la lenta evolución de las eras geológicas, determina una identidad propia (tierra de barros), cuyos matices genuinos contribuyen a configurar una identidad a nuestra futura oferta turística.
ESCULTURA DE CHILLIDA
MAQUETA
VISTA DEL CONJUNTO , ENTRADA
ALZADO